MOTES DE GRIEGOS
 
El Diccionario de la Real Academia define al mote como "sobrenombre que se da a una persona por una cualidad o condición suya. Apodo"
La palabra mote procede del latín muttum y significa juzgar. De la palabra latina apputare, que significa palabra o frase breve, procede la española apodo. Alias también se deriva del latín aluis y significa otro, de otro modo, por otro nombre.
El fenómeno de apodar a las personas es universal y como puede deducirse por sus definiciones el llamar a la gente por otro nombre es un fenómeno tan corriente como inexplicable. Poner apodos a las personas constituye un ejercicio mental, mezcla de maldad curiosa, ingenio e ironía.
Unos apodos son antiguos y, como las riquezas y las enfermedades, hereditarios, pasando de padres a hijos y de generación en generación; otros van apareciendo por el ingenio de cualquier vecino.
Para que quede constancia, yo enumero los que conocí en Griegos que por su despoblación creo que no han seguido, ni van a seguir heredándose.  
 
La Agustinilla
El Caches
El Caguetillas
El Calores
Los Cavilos
El Cirjuano
El Cojo
El Colache
El Colorao
El Cupido
El Dominguete
El Chamela
La Chipa
El Fus
El Machuca
La Maríona
El Miracielos
El Montero
El Morrazos
El Pancheta
El Paquillo
El Patarrilla
El Pelao
La Pitilla
El Preso
La Quicota
El Rasgatelas
El Reverte
El Rompo
La Tordeja
La Trucha
El Zapatero
El Zocato

Zaragüeta

 

Jose Juan Herranz Martínez 13/12/2009